Go on y el apocalipsis zombie. Un año ya (11 de junio de 2019)

Ayer se cumplió un año de tu boda. Del "Go on" de nuestra adolescencia bailado como si fuera Nightwish.

No me resisto a compartir por aquí el texto que leí en vuestra ceremonia especial. Un texto que podría inspirar para otros textos de otras ceremonias como la vuestra. Un honor que contáseis conmigo. ¡Felicidad!


EL APOCALIPSIS ZOMBIE

Si hoy llegase un apocalipsis zombie, en tres o cuatro segundos los mejores momentos de nuestras vidas pasarían delante de nuestros ojos. Seguramente vuestra boda sería uno de esos momentos, como lo sería también el instante en que nos conocimos, Rebeca, en el aula 507 de Ciencias de la Información.

También pasaría por delante, en un flash, la vez que nos colamos en una clase de primero porque nos caía muy buen aquel profesor, Danny De Vito, armado con el tipómetro, momento que tu risa delató.
Pasarían por delante de nuestra mente a toda velocidad, todas las veces en que tu risa interrumpió el oxidado discurso de un catedrático engolado, tus explicaciones de economía, o las decenas de palmeras de chocolate que nos comimos en esos años de facultad.

Si hoy mismo nos persiguieran los zombies, vendrían a nuestra mente los motes que poníamos a la gente, la devoción común hacia el hermano de Lidia Lozano y su café que “todo lo desvela”, las canciones a ritmo de Pimpinela en creatividad publicitaria y la falta de vergüenza que nos acompañó en esos días.

Otros recuerdos saltarían a nuestra mente: el viaje exprés a Dublín, las tiendas de recuerdos, cantar en gaélico, esperar en estaciones perdidas de tren, diseñar revistas en tu ordenador con la ayuda de tu tía Estrella, The Corrs, Natalie Imbruglia, el Macetero y el Doblón.

Nos asaltarían, cómo no, momentos llenos de urgencia: el déjame tus apuntes, no me acuerdo de nada, momentos llenos de humor, han encontrado un dedo en las lentejas, o las risas a costa de los vestidos de pescado en nuestra falsa graduación.

Si hoy mismo acabase el mundo, seguro, con todos esos momentos: con nuestras primeras prácticas, con los viajes. Nos quedaríamos con Mago de Oz, con visitas a Vallecas. Con bailar Bisbal como si fuera Evanescence, cantantes de Eurovisión que nos recuerdan a Nightwish. Nos quedaríamos con entendernos sin hablarnos, con tener siempre 18 años y colarnos en los estrenos. Nos quedaríamos con que Juan Y Medio trate de ligarnos, con descubrir la belleza de una Barcelona desconocida. Con nuevos escaperooms, con Rubén aguantando tus escapadas nocturnas a la caza del Pokemon. Con tu familia y aquellos focus groups improvisados en tu comedor que acababan a ritmo de Mecano.

Han pasado casi veinte años desde que nos conocemos y me alegra compartir con vosotros este momento tan especial de vuestras vidas. 

Queremos, todos los que estamos aquí, que vuestro amor os aleje del abismo.

Queremos que recibáis siempre la suave caricia de la vida, que nunca sean vuestros gatos refugio de la soledad. 

Que seáis juntos un número primo (esencial, indivisible, único), pero lleno a la vez de complejidad. 

Que vuestro amor tienda al infinito, ese infinito que hoy escribís en presente, pero que está lleno de futuro. 

Que no dejéis de sumar y multiplicar los buenos momentos.

Todos tenemos personas con las que nos encontramos en este largo y arduo camino y se quedan para siempre a nuestro lado. Vosotros sois afortunadamente esas personas para nosotros. 

Os deseamos toda la felicidad posible para este nuevo mundo que estáis construyendo.

Comentarios

Entradas populares